Por: Paulina García M.
Si quieres conocer más a fondo los sucesos ocurridos en Chernobyl respecto a la explosión nuclear de 1986, la cual provocó un gran nivel de radiación y con esto reacciones físicas en las personas que se expusieron a ella, tienes que ver la serie de HBO “Chernobyl”.
Se trata de una de las series más galardonadas e incluso ha sido ganadora de los Globos de Oro del 2020 como la mejor miniserie realizada para la televisión.
“Chernobyl” se encuentra apegada a los hechos acontecidos en la Central nuclear de Vladimir I, cuando un reactor explotó provocando la liberación de material radioactivo en los sitios cercanos. La serie, más que dar a conocer al culpable de dicha situación, busca mostrar la irresponsabilidad y lo negligente del gobierno de la Unión Soviética de aquella época, quien trató de ocultar la verdad a la población.
De forma que, la cinta además de ser una reconstrucción de los sucesos históricos, también es una reflexión sobre las consecuencias que pueden traer las mentiras, tanto a nivel personal como a un nivel global. Así que, esta serie comienza interrogando al espectador diciendo:
“¿Cuánto cuestan las mentiras? No es que vayamos a confundirlas con verdades. El peligro es oír tantas que ya no reconozcamos la verdad. ¿Qué hacemos entonces? ¿Queda algo que no sea abandonar la esperanza y contentarnos con cuentos? En esos cuentos, da igual quiénes sean los héroes. Queremos saber de quién es la culpa».
Es así como,“Chernobyl”, a lo largo de cinco capítulos, muestra la manipulación de datos por parte del gobierno y las mentiras de éste para no perder su reputación, así como su negativa a aceptar la opinión de la comunidad científica y de los expertos en el tema, lo cual termina costando la vida de cientos de personas.
De manera que, a lo largo de la trama, Craig Mazin, guionista y productor de esta serie, logra envolver al espectador en cada uno de los capítulos, mostrando un hecho histórico como una proyección de ciencia ficción que resulta inquietante, pero que a su vez proporciona al televidente un mayor conocimiento de los sucesos, así como una reflexión sobre la importancia de enfrentarse a la verdad en un mundo en el que la mentira, tanto por parte de los medios, de los gobiernos y también de las personas que nos rodean e incluso por parte de nosotros mismos, es algo cada vez más común.
