En teoría, el día de tu boda debería ser de los más felices de tu vida, donde la alegría le gana al mal humor o a cualquier desperfecto que se pueda atravesar durante la celebración.
Desafortunadamente, para este novio no resultó tan grato, el primer incidente que ocasionó el enojo del hombre fue cuando se le cayó el cuchillo del pastel y su molestia fue realmente evidente.
Pero esto no paró aquí, cuando la botella de vino que se agitó para que bañara a los recién casados no salió con la fuerza necesaria, el enfurecido novio estrelló la botella contra el piso ante la mirada de los asombrados invitados.