Un perrito yacía a un costado del camino Brookhaven, Mississippi sobre un sofá, que, como él, habían sido abandonados en medio de la nada. El perrito de cuatro meses corrió con la suerte de que Sharon Norton, oficial de control de animales lo encontrara; poco a poco Sharon se ganó su confianza con alimento y agua hasta que logró subirlo a su vehículo para trasladarlo a un refugio.
«Tu cachorro te estaba esperando, muriéndose de hambre lentamente porque le daba miedo dejar el sillón para buscar comida. Qué vergüenza…pero un día el karma dará contigo», escribió la veterinaria en redes sociales.
Cuando compartieron la historia de este hermoso perrito en redes sociales, la empresa La-Z-Boy Gtason reconoció que el sillón donde encontraron al perrito, había sido fabricado por ellos, por lo que donaron 50 camas para perros al refugio que ahora alberga a Gatson, nombre que le dieron a este precioso perrito.
¡Por favor, no abandones a los animales!