Por Paulina García M.
Decía Octavio Paz en uno de sus poemas que: “un mundo nace cuando dos se besan”; esta metáfora es muy cierta, pues en un beso intercambiamos una gama de sensaciones placenteras con el otro. Pero no sólo eso, sino que además de los beneficios en nuestro estado anímico, que se dan al liberar dopamina y oxitocina, ahora, recientes estudios publicados por Archives Of Sexual Behavior encontraron que besar también puede ayudarnos a bajar de peso.
En dicha investigación se descubrió que cuando besamos apasionadamente quemamos calorías, debido a que usamos alrededor de 30 músculos de nuestro cuello y rostro.
De forma que, de acuerdo con la duración y la intensidad del beso, gastaremos aproximadamente de 6 hasta 100 calorías durante una sesión. Siendo así que, en el caso de uno muy fogoso, podemos quemar incluso 12 calorías por minuto.
Por otro lado, en ocasiones los besos son el complemento perfecto antes o durante la intimidad, dándole un toque aún más excitante al acto, en este caso, de acuerdo con Bryant Stamford, director de Promoción de la Salud de la Universidad de Louisville, se incrementa la quema calórica:
“Si estás apasionadamente involucrado, vibrando. Si las cosas estuvieran realmente calientes y pesadas, podrías estar registrando un gasto calórico similar al de una caminata rápida”.
Así que, si quieres bajar de peso de una manera placentera, no dudes en tener largas y apasionantes sesiones de besos.
