Hace apenas una horas compartimos en este espacio el ataque que sufrió una mujer cuando salía de una tienda, un desconocido le echó encima un café hirviendo.
Ahora, Luis Gerardo Ramos de Reynosa, sufrió un ataque por parte de una mujer que le arrojo cloro y comenzó a gritarle que el personal de salud eran quienes infectaban el estado.
«Llegué a la tienda con mi cubrebocas y uniforme. La señora gritaba que nosotros somos los culpables de todo lo que está pasando. Yo no soy culpable de que no se quieran cuidar y no lleven a cabo las indicaciones que nos siguen dando de quedarse en su casa».
Basta de ataques al personal médico, ellos dan todo por la salud de sus pacientes. Quedarte en casa es la mejor forma de evitar el contagio.
«Ahora ya no puede uno salir con su uniforme de enfermería por miedo a que ya no sea una botella de cloro, después no vaya a ser una botella de ácido»
