La familia de Ángel “N” de 42 años, un hombre que murió por COVID-19 en Coatzacoalcos, Veracruz, no pudo despedirse del paciente fallecido ya que el IMSS le entregó su cuerpo a personas que no eran sus familiares y ahora lo devuelven declarando que “hubo una errónea identificación de cuerpos”.
El Hospital General de Zona (HGZ) número 36 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) comunicó inmediatamente a la familia que Ángel había fallecido el sábado por la mañana, pero la funeraria que contrataron no tenía disponibilidad para dar servicio hasta el lunes 6, por lo que el cuerpo de Ángel permaneció en el mortuorio del hospital.
Cuando la esposa de Ángel, Dulce María Andrade Valdés, se presentó el lunes a reclamar su cuerpo, el personal del hospital le mostró el cadáver de otra persona que no correspondía al de su marido.
En un comunicado, el IMSS se disculpó con Dulce María e informó que la confusión se dio debido a que el sábado 4 de julio se registraron dos decesos en el HGZ 36: uno de ellos el de Ángel, a las 11:50 horas, y el otro que ocurrió poco tiempo después. Horas más tarde, dos personas se presentaron a reconocer al segundo paciente fallecido y señalaron el cuerpo de Ángel como el de su familiar, por lo que les fue entregado.
Ahora Dulce María recibirá el cuerpo de Ángel ya en cenizas mientras que la familia del otro hombre fallecido reconoció el cuerpo de su pariente.
Con información de Magaly Montoya.
